las primeras horas de la mañana
están colmadas de neblina
ocultando los lugares más allá
de la cabaña de piedra blanca envuelta en hiedra y su jardín
ausente la colina de eucaliptos al otro lado del barranco
la única forma de saber la diferencia entre la neblina y las nubes
es a través de su distancia sobre la tierra
sin embargo estas tierras están tan arriba del mar
como podemos saber la diferencia entre lo singular y plural a estas alturas?
entre la neblina y las nubes? un recuerdo y las cosas sustanciales?
un vendaval de pensamientos y una tormenta? la nieve derritiéndose y una piedra o un río?
la fría humedad del aire se siente como si fuera nieve
y el blancor de la nieve y la neblina se hablan
a través del tiempo y el espacio que quizá nunca han existido
Estoy parada junto a la cabaña
en una cascada de verdes ramas
una recatada gota que engloba el mundo en su esfera
se forma en la punta de cada hoja del pirul
en la medida que avanza la mañana la neblina se sube por las colinas
y se convierte en nubes
la luz del sol ilumina la abundancia de hojas en el jardín
es como si brillaran por dentro
cada una de las gotas diminutas se ha desvanecido
tan solo dejando su transparencia
—Lorena Wolfman (19-2-22)
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