miércoles, 5 de mayo de 2010

la danza

una estrella lejana
titila en la intimidad de la distancia

con los dedos la alcanzamos
con ternura

desde las alturas
miramos un valle y una brecha

miramos juntos hacía el mar

nos convertimos en viento
tormenta y mar
y en una agitada bandera sideral
en llamas

con nuestras manos
colectamos aguas
que tiemblan con vida

bailamos tango
en un bar mustio
a media luz

bailamos el fino desinterés
elegante de palacios del setecientos

con el mínimo tacto de los dedos
me llevas y circulamos
como dos cometas rodando
por los cielos

tu:
mar
furia
yo:
fuego
apacible

el brillo de tu mirar constante
atento a lo que no se ve

cuando entro en calma
me vuelves a llamar

al peinar el aire con tu mano
revelas lo jamás visto

corrientes suaves
se arremolinan
en el universo invisible

sin mirarnos a los ojos
encontramos el compás
de esta danza eterna

danza interna externa
reflejo de todo lo que existe
que nos exige la atención atónita

echamos mano a la fragua de la creación

nuestros puños asidos del pulso primigenio
penetran su densidad

le damos vueltas
al compás de esta danza etérea

como estudiantes asiduos
manejamos lo invisible
                             hecho visible

por Lorena Lobita © 2010

1 comentario:

  1. Lobita, hacía tiemo que no te visitaba, y me encuentro con esta maravilla de poema. Es muy bello!
    me gustó especialmente estos versos:
    "con el mínimo tacto de los dedos me llevas..."
    es tan bellamente tanguera esa imagen sensorial.!
    Bello, Lobita, muy bello
    Abrazón de alma,ya sabés desde Los Altos Limpios
    Osvaldo

    ResponderEliminar